El evento convoca a proyectos sobre conservación de la memoria de ocho países del mundo
Este martes 21 de marzo arrancó el III Encuentro de Conocimientos Indígenas y Tradicionales, en la comunidad de Sotuta, Yucatán.
El evento, promovido por la iniciativa Imaginando Futuros y Cultiva Alternativas de Regeneración, convoca a proyectos de mujeres sobre la recuperación y conservación de la memoria de ocho países de todo el mundo.
Asimismo, en el encuentro se retratan temas como el “memoricidio” de los pueblos originarios, es decir, el borrado de las expresiones y la historia de una cultura y la recuperación de conocimientos ancestrales en sus países, entre otros.
El encuentro inició con una ceremonia a cargo de Alika Santiago y Yamile Dzul, mujeres mayas que guiaron el espacio y las ofrendas de las personas invitadas
“En nuestro calendario maya hoy es día 2 ik’, 2 viento. Un día que nos remonta a la energía del pensamiento, la dualidad y el equilibrio. Además, es luna nueva y hoy llega la primavera. Es un día de grandes inicios y cuando comenzamos el nuevo ciclo de la vida. La energía de hoy nos invita a ofrendar en nuestras tierras mayas de resistencia, la sabiduría de abuelas y abuelos mayas pero también de nuestros abuelos y abuelas de África, Asia, América, de toda nuestra madre”, expresó Alika Santiago al iniciar la ceremonia.
Las ediciones anteriores se realizaron en Ghana y Turquía, este mismo año.
El foro en Sotuta también es el cierre de esta serie de reflexiones presenciales cuyas conclusiones tomarán la forma de un manifiesto escrito de manera colectiva al cierre de las jornadas, el 24 de marzo.
Los proyectos invitados provienen de Colombia, Perú, Reino Unido, Kenya, Tanzania, Australia, Estados Unidos, Canadá y varios estados de México, y aunque sus enfoques son distintos y trabajan en territorios locales, tienen en común el uso de metodologías y archivos que conserven o restauren el conocimiento tradicional y/o indígena de sus regiones como una forma de resistir al memoricidio.
Durante el acto inaugural, Daniela Mussali, representante de Cultiva Alternativas de Regeneración, explicó que el 12 de julio de 1562 se realizó el Auto de fe de Maní, la quema de los Códices Mayas. A 461 años de ese evento, “hoy, estamos reunidos para sanar la memoria y restaurar la raíz. Es un honor hacerlo en conjunto y que hayan venido de todas partes del mundo para que este sagrado territorio reverdezca desde su sabiduría profunda”.
Alika Santiago, activista maya y fundadora del colectivo K’luumilK’ooleloob (Tierra de mujeres), también impartió el taller Sak Bej, una metodología construida desde la cosmovisión maya para hablar sobre los vínculos con el territorio y la cultura, como una manera de presentar a todos los proyectos.
Explicó que el camino blanco, el Sak Bej, es un elemento muy importante en la cosmogonía maya porque es el ritual ceremonial del camino de la vida, donde se vinculan los tres niveles del mundo: subterráneo, terrestre y celeste. También es el nombre de un camino físico que vinculaba las principales ciudades mayas como “el cordón umbilical del pueblo”.
“En el caso de nuestra metodología lo que nos propone es que cada una de nosotras y nosotros somos caminantes. Y aunque estemos paradas en un mismo lugar, nuestra consciencia de la vida puede estar en otra dimensión. Cada una de nosotras tiene una interpretación diferente de la vida ante un mismo hecho. Una misma situación desencadena muchas otras cosas. El camino blanco nos permite encontrarnos y saber que ante las diferencias, seguimos estando en un mismo punto”, dijo.
El encuentro continúa hasta el 24 de marzo.